Encontrar un punto medio entre estos dos es la mejor manera de premiar el esfuerzo laboral sin que esto signifique vivir al día o, peor aún, endeudarse. Imagínate, si hoy debes dinero a tus tarjetas de crédito y estás generando intereses por compras desmedidas, ¿cómo se potenciaría ese mal hábito cuando tengas tu propio negocio?