Mientras más credibilidad posea, más confianza tendrá la gente en usted, y en consecuencia le conferirán el privilegio de influir en sus vidas. Mientras menos credibilidad posea, menos confianza depositará la gente en usted y más rápidamente perderá su posición de influencia. Todo se levanta o se viene abajo a causa del liderazgo. El secreto para levantarse y no caer es la integridad.
La integridad produce confianza:
Muy a menudo, las personas que tienen la responsabilidad de dirigir se vuelven hacia la organización para hacer que la gente sea responsable de seguir. Piden un nuevo nombramiento, otra posición, otro organigrama, una nueva política para detener la insubordinación. Lamentablemente, nunca logran tener suficiente autoridad para ser efectivos. ¿Por qué? Ponen la mirada en factores externos cuando el problema radica en los internos. Carecen de autoridad porque carecen de integridad.
La integridad tiene un valor de mucha influencia:
Su carácter determina el carácter de la organización. Las personas cambian de opinión por la observación y no por los argumentos. La gente hace lo que ve.
La integridad forja patrones elevados:
Los líderes deben regir sus vidas de patrones más elevados que los de sus seguidores. Esta realidad es exactamente opuesta a los pensamientos de la mayoría de las personas en cuanto al liderazgo.
La integridad da como resultado una reputación sólida, no solamente una imagen:
Imagen es lo que la gente piensa que somos. Integridad es lo que realmente somos.
Integridad significa vivirla uno mismo antes de dirigir a otros:
No podemos dirigir a alguien, más allá del lugar donde hemos estado nosotros mismos. Muchas veces nos preocupamos tanto por el producto, que tratamos de acortar el proceso. No hay atajos cuando se trata de la integridad.
La integridad ayuda a un líder a tener credibilidad y no sólo a ser listo:
Los líderes que son sinceros no tienen que anunciarlo. Su sinceridad se ve en todo lo que hacen y pronto llega a ser del conocimiento común. De igual manera, la falta de sinceridad no puede esconderse, disfrazarse o encubrirse, no importa cuán competente pueda ser un administrador.
La integridad es un logro muy difícil:
La integridad no es un hecho dado en la vida de todo ser humano. Es el resultado de autodisciplina, confianza interna, y una decisión de actuar con una honestidad inexorable en todas las situaciones de la vida.
Fuente: Desarrolle el líder que está en usted.